Entradas

Mostrando las entradas de abril 20, 2012

CAROLINA TIERRA DE LAS CHANCHULLERIAS

Por Redacción de Radio el Faropr.com La actual situación que confrontan los dos principales partidos políticos (PPD-PNP) con  acusaciones de fraude electoral en las primarias del pasado 18 de marzo de 2012, ha comprobado nuestros planteamientos en el sentido que hemos sido víctimas del atropello de ambos partidos  el PPD y el PNP por 64 años.  Los partidos que se roban entre ellos mismos, para nada merecen la confianza pública de un Pueblo. No se sabe con certeza, quién de los dos partidos es más ladrón y corrupto y se las pasan enfrascados en imputaciones mutuamente de quién roba más que quién que son asqueantes. Aflora en estos días el caso de las comunidades especiales bajo la administración del PPD donde tres facinerosos , nebulosos y vagos listos se han limpiaos más de 6 millones del erario público y el Departamento de Justicia, no dijo ni esta boca es mía y dejó deliberadamente que los casos prescribieran. En el Municipio de Carolina ha ocurrido igual con los casos  de

COMPARACION COMPARACION DE CAROLINA PUERTO RICO Y LA ALEMANIA NAZI.DE CAROLINA PUERTO RICO Y LA ALEMANIA NAZI.

Recopilado por Redacción de radio el faropr.com Ante la barbarie de lo que se está viviendo en Carolina y el tribunal inquisidor llamado Departamento de Asuntos Internos (DAI) todo esto en Apontelandia de Jose Carlos Aponte Dalmau  en el siglo XXI, en Puerto Rico y dentro de un territorio Norteamericano frente a la aberrante “sentencia” de unos juez serviles contra los empleados del Municipio de Carolina y los policías, hecha a la medida del teniente coronel Jose Carlos Aponte Dalmau, ante la persecución ilegal contra cientos de empleados indefensos, hombres honestos que solo buscan ganarse el pan de cada día para sus hijos y sus familiares y otros Carolinenses, no puede evitarse el pensar en la vigencia de lo planteado en el libro “Los juristas del horror”, de Ingo Müller (traducido al español por Carlos Armando Figueredo). En radio el faropr.com nos tomamos la libertad de reproducir el Prólogo que se escribió  Eduardo Casanova,  con motivo de su publicación en español, que, vis