LOS JOVENES, NINOS EL DRD Y EL DEPORTE EN PUERTO RICO.
Por José Cheo Cruz
La
Ley 8 ley que crea el Departamento de Recreación y Deportes
(DRD) en Puerto Rico tiene por objetivo establecer los principios
rectores del deporte, que consagran que su práctica estará orientada
esencialmente a la formación integral de los ciudadanos en lo físico,
intelectual y moral; a fin de contribuir al bienestar social de nuestro país
Puerto Rico.
Lo que no está
claro es que el Estado debe proteger a los menores de edad, enfatizando en la
práctica deportiva el aspecto lúdico-recreativo, para evitar presiones
competitivas a destiempo como es el hecho de jugar en varios equipos a la vez o
sea la doble y hasta triple participación deportiva en un mismo deporte como lo respalda las Pequeñas Ligas de Puerto
Rico y la Ligas Infantiles y Juveniles y otras supuestas ligas, solo para cobrar sus cuotas de buscones del
deporte, vividores y destructores de nuestro futuro deportivo y eso el Estado
en Puerto Rico, tiene que detenerlo ya e hizo
facto, porque es una acción criminal de los padres y de las ligas que lo permiten
, sin duda que son asesinos de niños y jóvenes menores de edad y el estado está
obligado a intervenir en ello sin duda, pero no lo hacen violando la ley, la salud de los niños y jóvenes
y los principios de cero maltrato a los
menores y prohibir que un menor de edad
pase al deporte profesional sin las debidas garantías, tanto de su integridad
física y mental, o sin la preparación adecuada. Por tal motivo, se deben establecer
mecanismos de control y supervisión según el criterio de los organismos
oficiales pertinentes entiéndase Departamento de Recreación y Deportes y Comité
Olímpico y sus Federaciones.
La Constitución debe señalar claramente sobre esto y llevar esto a
rango constitucional que corresponde al
Estado imponer y vigilar y hacer cumplir so pena de cárcel para los infractores
por ser un crimen a la niñez y juventud Boricua y esto debe ser en colaboración con los centros de enseñanza y
las organizaciones deportivas: fomentar, incentivar y apoyar la práctica y
difusión de las actividades deportivas; porque es función esencial del Estado
la protección efectiva de los derechos de la persona, el respeto de su dignidad
y la obtención de los medios que le permitan perfeccionarse de forma
igualitaria, equitativa y progresiva, dentro de un marco de libertad individual
y de justicia social, compatibles con el orden público, el bienestar general y
los derechos de todos los ciudadanos y uno de los derechos es garantizar la educación
adecuada y el deporte es un ente educativo por lo que junto al DRD deben estar
el Departamento de la familia y el Departamento de Educación de Puerto Rico y
el Comité Olímpico como organismo máximo rector del deporte de alto rendimiento.
El Deporte debe ser un bastión moral, y como tal, un
ejemplo a seguir en consonancia con la forma de valoración de nuestros atletas,
no solo en el nivel competitivo, sino en su integridad intelectual y moral
creando buenos ciudadanos en nuestro futuro.
El Deporte jamás puede acoger las inconductas como
señales de lo que debe ser la salud mental de nuestros jóvenes en el presente
ni en el futuro. El Deporte es apasionante en los resultados que se
obtienen en las competencias donde estamos representados; pero la
responsabilidad que debe asumir frente a su práctica, siempre debe servir como
vehículo idóneo de la formación integral de nuestros jóvenes, para preñar la
sociedad Puertorriqueña de buenos
ciudadanos y con ellos asegurar un mejor futuro para la patria “en valores” por
eso choco con mucha gente y no soy un santo pero soy un guardián por muchos años
de ello y me seguiré enfrentando a gente sin escrúpulos en el maravilloso mundo
de los deportes como supuestas escuelas que les cobran altísimas sumas sin ley
que los regule y que no ensenan nada y sus resultados lo dicen todo.
Andamos en el deporte como chivos sin ley usando hasta los recursos
del estado, negándole a ciudadanos de escasos recursos facilidades como Carmen
Yulin Cruz Soto en San Juan, Ramón Luis Rivera con Ryder, en Bayamón, el alcalde
de Florida con la mal llamada academia Beltrán, José Luis Cruz Cruz en Trujillo Alto con IBach
y José Carlos Aponte en Carolina porque eso es para sus intereses mercuriales
de la lumpen manía deportiva que padecemos hoy en Puerto Rico , en el deporte hoy
dio en Puerto Rico estamos en crisis.
La sociedad Puertorriqueña hoy más que nunca tiene la imperiosa necesidad
de recobrar el reinado de la moral, de la vergüenza y de la honestidad, que
conjuntamente con la justicia, la igualdad, la defensa de los derechos humanos
y la libertad, deben convertirse en las cotidianas normas de la conducta de nuestra vida democrática.
¿Qué estamos haciendo para que crezcan así, sin esperanzas? ¿Qué haremos
para cambiarlo? ¿Encerrarlos? Creo que eso calmará tal vez algunos síntomas,
pero la enfermedad se seguirá esparciendo por el cuerpo social hay que dale
educacion, deportes y principioen l hogar enla escuela ect.
La desesperanza sólo se cura con razones para creer de nuevo. Con algo concreto por lo que luchar. Con deseos de vivir y con posibilidades de ser. Si les damos eso, tal vez podremos comenzar a cosechar mejores frutos.
La desesperanza sólo se cura con razones para creer de nuevo. Con algo concreto por lo que luchar. Con deseos de vivir y con posibilidades de ser. Si les damos eso, tal vez podremos comenzar a cosechar mejores frutos.
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