LA DESESPERACION CAMINO DEL FRACASO.

Por José Cheo Cruz

Mis casi 39 años de ejercicio periodístico, político y deportivo me han enseñado tanto a asimilar insultos que puedo decir que estoy curado. Y cada vez que soy víctima de un ataque de esa naturaleza, como el que el alcalde de Carolina haga circular un documento con medias verdades y falsificado y alterado para intentar restarnos credibilidad es una muestra inequívoca de mis aciertos sobre su accionar desacertado y corrompido, no hago más que confirmar que, en verdad, soy deportista y periodista por vocación y convicción. Me halaga la bonanza de mis colegas que la alcanzan y no escudriño en sus orígenes.

Confieso que en más de una ocasión, he soportado con satisfacción y orgullo el calificativo de “pendejo” que hasta los suyos le dan al que no saca provecho de sus relaciones, como es mi caso. Pero, insisto, mi masiva prole compuesta por 5 hijos, 9 nietos y un biznieto, tendrán que conformarse, cuando yo deje este mundo, con la herencia del respeto y reconocimiento, quizás, de un periodismo pluralista y abierto, aunque de verdades que duelen.

Estas reflexiones vienen a cuento porque acabo de recibir un email que procura insultarme, desacreditarme ante los ojos de deportista muchos probos y otros buscones de mil campañas y puesto allí por politiquerías del partido en el poder de Carolina y más bien me animan a mantener mi línea. El mensaje que por correo están enviando no es del todo verdad, falsifican hechos y no dicen los desenlaces finales en algunos casos pero así es la vida Verdades contra mentiras falsificadas de parte de los ineptos de Carolina Municipio, que poco bueno generan en esas lídes por el bien común que no sea el desasosiego colectivo, por eso usan un seudónimo, con una organización comunitaria inventada que no existe ni en los centros espiritistas que frecuenta Mabel López por allá por adjuntas para brujear.

Ante esos ataques destemplados y maliciosos, que pretenden juzgar el mensajero y no el mensaje y que lo único que han logrado es conocer mas amigos que los que creía tener porque son mas los que me envían informaciones internas como el empleado de Obras Publicas de 40 años Jose Torres que entre Izamí Ayala y la nueva agrónoma Emerita que le hace honor a su nombre cuando vía hostigamiento, han asesinado a este empleado provocándole un sincope cardiaco, por las injurias que les hicieron, eso debe andar en sus conciencias que no los deja dormir son asesinos en nombre del principito José Carlos Aponte Dalmau.

Ante tanta injuria y maldad, un mundo contaminado de malicia y resentimientos, conviene saturarnos del candor, la bondad, el desprendimiento de los niños y seguir con nuestras causas por los niños.

Hoy el mundo anda muy mal de la mano de los hombres como estos que gobiernan el Municipio de Carolina. Necesita ser renovado diariamente en el espíritu de nuestra mente para que lleguemos a ser sencillos y humildes como los pequeñuelos. “Si no os volvéis y os hacéis como niños, no entrareis el reino de los cielos.

Hoy tengo la necesidad de plasmar con mis manos las cosas que pasan por mi mente la cual pide a gritos que la limpie un poco.

Quiero empezar deshaciéndome de una soledad que ya no existe, que se ha cubierto de amor, paz y tranquilidad, la cual solo vaga en mi mente buscando una necesidad para poder rescatarse de ser desechada de mis paredes mentales que tanto la protegen.

Quiero decir que la vida en poco tiempo me ha dado lecciones que no olvidaré aunque me arranquen los recuerdos de la mente y el hipotálamo me ha enseñado que es mejor aprender de los errores de los demás, que desear ser un héroe y pasar por lo mismo por que lamentablemente es una pérdida de tiempo, me han enseñado a ser perseverante a pedir perdón y a valorar las cosas, el tiempo y los recuerdos.

Me han enseñado a creer en mí, y en los demás, me han enseñado que la vida es dura, si no tienes a la persona que esta clavada en tus pensamientos y en tu cuerpo de la misma manera que se clava un cuchillo en la piel humana, e igual de doloroso.

Me han enseñado a reconocer cuando lo he hecho mal, me ha enseñado cómo levantarme y a entender por qué las cosas pasan; lamentablemente no son cosas del destino como nuestra ignorancia quiere disfrazarlas, son decisiones que tomamos conciente e inconcientemente pero de igual manera tienen consecuencias.

Me han enseñado que somos seres imperfectos por lo que no podemos exigir que los demás se comporten como personas perfectas, me ha enseñado a reconocer que ellos también cometen errores igual que yo, que debo aprender a vivir y aceptarlos tal cual, siempre y cuando no me afecten con mis ideales y creencias que es lo que hacen desde el quinto piso.

Me han enseñado que todo dolor en esta vida es temporal, y no es como en las novelas, me ha enseñado que las lágrimas derramadas en una noche de angustia no son nada, comparadas con la lección de vida que aprenderemos en el mañana.

Me ha enseñado que se puede ser loco, se puede ser fuerte, se puede ser débil, se puede ser cobarde, se puede ser humilde y egoísta en fin se puede ser uno mismo.

Que en paz descanse el héroe del Municipio de Carolina victima de la injuria y el hostigamiento de Isasi Ayala y la nueva agrónoma avasalladora de nombre “Emerita” que no hace honor a su nombre sino al desmerito ¡Bárbaros! y que Dios acoja en su seno a este humilde obrero y empleado de Obras Publicas Municipal de Carolina, asesinado con cuchillos de palo por los malvados del Municipio, Isamí Ayala ASESINAAAAAAAA de humildes trabajadores porque ya enviaste a otro al Hospital y sabes que digo, la verdad.

Ingeniera Isasi Ayala por sus in conductas y mala formas de tratar a los seres humanos se ha marchado un verdadero representante de la clase humilde, uno que a pesar de venir de la nada siempre tenía para dar lo mejor de si, porque para él los logros obtenidos en su trabajo diario en Obras Publicas Municipal tenían un fin determinado que jamás podía compararse con la felicidad que logró en muchos.

En este siglo de la revolución del conocimiento lo que he planteado es la necesidad de transformar el modelo económico, el sistema político, la educación, los deportes para los niños y otros componentes de la sociedad Puertorriqueña.

Estas transformaciones corresponden a una variable externa difícil de controlar si no controlamos primero la variable interna que genera la disfunción de la externa como estos difulcadores y sembradores de discordias.

La transformación que se demanda debe experimentarse de manera personal, a fin de despojarse de un amor egoísta y adueñarse de un amor trascendental, dirigido hacia el bien de los demás en todas las esferas de la vida.

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