A LOS ENCAPUCHADOS DE LA UNIVERSIDAD DE PUERTO RICO.

Por José Cheo Cruz


“El sol achicharra aquí todas las cosas// desde el cerebro hasta las rosas”.-(“West Indies”, Nicolás Guillén)

Como estoy segurísimo que ustedes, señores que dirigen la llamada huelga de la Universidad UPR y sus “compadritos encapuchados”, se han arrogado la “representación” de la gran mayoría de los estudiantes y del pueblo en general, sin que nadie los haya votado, hayan ido como candidatos a unas elecciones, o algún plebiscito haya dispuesto que sus encapuchados “mata gente””rompe carro y vitrinas” sean “dirigentes” de nada ni de nadie; supongo que ustedes, como todos los ignorantes extraviados (hablo de Sócrates, el filósofo) se creen “líderes” o “jefecitos” del pueblo, y por eso sin que nadie le reconozca virtud o calidad alguna (como inteligencia, sensatez, honradez, educación-formación, o valor como persona y como hombre: que implican respeto a sí mismo, amor a su familia y la conciencia de que sus derechos comienzan donde terminan los de los otros), llaman cuando quiera a “un pareo armado de palos, piedras e instrumentos para agredir”.

Aunque se crean algunos, se que los “grandes líderes” de izquierda o independentistas de Puerto Rico a quienes respeto y admiro, dudo que hayan leído el folleto de Lenin: “¿Quiénes son los enemigos del pueblo?”, y ustedes son uno de esos enemigos, responsable de romper todo en la Universidad a mansalva de todo lo que se mueva en la UPR (cosas útiles que por lo menos vendían alimentos a los compañeros Universitarios para saciar su hambre, cosa que ustedes nunca han hecho). Ustedes los responsable, impuesto a llamar a “huelgas” (que son “paros armados”), porque la gente suya como todo cobarde, dirá que no son suya- salen en las pantallas de TV disparando piedras, palos, etc., a la Policía y además, asaltando la privacidad de hombres y mujeres estudiantes y luego dicen policía represiva, veamos las dos caras para ser justo.

Ustedes están conscientes de que no han llamaba a ninguna “huelga” para que la gente de Puerto Rico tenga mas escuelas, agua y luz mas barata, arreglo de calles, comida para los pobres, trabajo para el desempleado que somos demasiados ahora con Fortuño, contra la eliminación del sicariato, del narcotráfico, la inseguridad ciudadana, etc., porque usted (y yo) sabemos que nunca han arreglado escuela, ni dado agua a nadie y ni siquiera su propia casa arreglan (usted creen que no lo conocemos por la capucha y saben que sabemos quienes son, eso se ve muy mal del movimiento y dice mucho de la lucha que se lleva, así no se hace patria, ni se logra respaldo del pueblo, los grandes hombres del mundo andan de frente ante la luz del sol sin temor alguno a los gendarme, respaldo la lucha Universitaria, pero no a los encapuchados ¡jamás!.Lenin, Mao, Fidel, Marthin Luther King, Mandela, Gandy, nunca usaron capuchas para sus luchas.

2.- Ignorante y reaccionario

Ustedes viven organizando disturbios porque son ignorantes y reaccionarios tal vez pagado por manos asesinas y ladronas-; los enemigo de los estudiantes son usted y compartes. Ese mal necesario salido de la escoria, que es el precio que los pueblos deben pagar en su camino en procura de la perfección de los instrumentos de su democracia.

Como son unos irresponsable y el país Puerto Rico, está harto de delincuentes de su jaez, que se creen “Mesías” hasta caer en la degeneración en que viven hoy-; pero ahora ustedes se inventarán todas las excusas y mentiras, pero el luto y el dolor abaten los hogares de muchos padres que envían a sus hijos buenos. Ustedes son los responsable de esas situaciones de terror y como la Justicia esta repleta de jueces que tiemblan ante las amenazas de sujetos de la calaña de sus conmilitones, y si fueran y los acusaran en el tribunal para que paguen sus crímenes; que es lo que deben hacer los familiares de los estudiantes que no los dejan estudiar por ser cabeza de las acciones terroristas.

Quizás sea crea ser “progresista”. Si lo cree, vaya a Cuba, a Francia, a Venezuela, a Dubai o a EEUU y saque sus encapuchados y disparen a gentes, lancen piedras, incendien vehículos, asalten negocios, rompan todo a su paso y asesinen a quienes no se plieguen al chantaje de “¡huelga por la matricula, a ver si ustedes estuviera en su casa “echándose fresco”. ¡Ustedes no valen la pena, mis lectores saben a quiénes les escribo- deplorables piltrafas humanas! No al reclamo justo de reducir el alza en la matricula me refiero a los delincuentes encapuchados, el reclamo contra el alza de la matricula es justo, los encapuchados, NO.

3.- Huelga y disturbios

Hace tiempo que venimos diciendo que se acercan grandes cambios y disturbios en la escena de la humanidad. La crisis económica desde el 2005 no incluyó el precio de la comida; el arroz, básico en Asia y América. Los especuladores con el petróleo y sus derivados, movieron sus compras a futuro bienes básicos de consumo masivo alimentos: 360 millones en America Latina viven con 300 dólares al año; el aumento del arroz y el trigo han lanzado ya 400 millones de seres a la línea de la pobreza. “El cálculo egoísta”, trae las 10 las plagas de Egipto (los acaparadores). Aparte de los robos de Mubarak-Gamal, Egipto gasta el 40% del presupuesto en subsidiar el trigo a los pobres.

Mientras los hospitales de Puerto Rico suspenden los servicios a los enfermos de “Mi Salud” o como se llame, en una actitud deshumanizada, en Guatemala hay un programa de Salud Para los Pobres y los 60 mil maestros piden la inclusión de sus padres y en Ecuador hay un banco que ha convertido a los pequeños comercios en mini-bancos, cuyas operaciones benefician al banco y también con 5 ó 10 dólares ahorrados, a los clientes el alza en la matricula se puede protestar pero no si cariar en la Universidad y amenazar a todos.

Cierto es que aquí la gula ha destruido a pequeñas oficinas de pagar los servicios se las dieron al Banco Popular. “El derecho a la huelga no puede ser derogado, ni desconocido”, sin la revolución bolchevique los capitalistas no hubieran hecho concesiones a los trabajadores. En una sociedad democrática todos (incluso las minorías) tienen derecho a la huelga y a la protesta; o decir lo que se les venga en ganas (escoger su forma individual de vida). Pero los sujetos se creen “reyes” de una “revolución de saliva”: asesinos, sicarios, incendia carros, colmados, negocios; derriba árboles; que pagan a ‘viciosos, o tecatos’ (tipo el cura Capón en Rusia) para disturbios, terroristas en fin, hay que poner freno a estas acciones desmedidas de los encapuchados.

Lo cierto es que en Puerto Rico hay una queja creciente de simples ciudadanos y de sectores sensatos del país es que la mayoría de instituciones y funcionarios no funcionan, que no cumplen con su responsabilidad y deber, y que cuando hacen algo, muchas veces resulta lo contrario al rol asignado y respondiendo a intereses particulares.

Así las cosas, observamos –unos con preocupación e impotencia y otros con clara complicidad e indiferencia como se permean y se permite todo en alegre violación de las normas y las leyes, y pisoteando derechos ciudadanos fundamentales. Por años ha sido la realidad de los consumidores Puertorriqueños, y eso hay que combatirlo con protestas masivas pero con decencia, contra la partidocracia que nos engaña impunemente , estos políticos de los dos partidos principales PPD y PNP también estos son una especie de encapuchados.

Alguien –y si no había pantalón, una falda– tiene algún día, sin importar consecuencias, que proponerse un freno al relajo y la cadena de abusos en perjuicio de consumidores y usuarios de distintos servicios, entre ellos los financieros y bancarios que son los culpables de la crisis económica en toda la Nación Americana, al dar hipotecas falsas para llenar sus bolsillos y los políticos corruptos del patio que le exigen dinero a la empresa privada para dar contratos, o crear leyes que le beneficien, en otras palabras, sobornos para sus bolsillos, vean el juicio en el Tribunal Federal, así es que estamos en el Puerto Rico de hoy.

Lo penoso es que el 50% de la “república falaz de la Isla del Encanto”, más los ricos, no vean que la democracia verdadera debe crear los mecanismos para la expresión de los descontentos, pero además los instrumentos jurídicos para detener el sicariato, secuestros, homicidios, la violencia, robos, terrorismo, el chantaje y ¡Justicia! en sentido general. Nadie ha podido eliminar a los bandidos, pero señores: ¡estamos al borde del despeñadero! ¿O es que no os veis? Tiene derecho a protestar pero no a romper todo y amenazar a quien no se le una, ¡convénzanlo! con disertaciones.