PUERTO RICO ¡ACABEMOS CON ESTO YA!

Por José Cheo Cruz

Hoy día lo correcto es un obstáculo en el accionar laboral. La inversión de valores ha llegado a tal extremo que los hombres que caminan por la derecha son una retranca a la hora de ejecutar proyectos y negocios, amparados en el engaño y la falsía. Predomina la adulteración en los costos debido a la sobrevaluación.

Los capitales generados en esta inescrupulosa práctica tienen como fuente el erario, siempre depredado en menoscabo de las necesidades básicas de la población: salud, educación y nutrición. El mercado de comisiones por compras y ventas de productos y servicios se realiza en base al grado de activismo político y lobismo privado a espalda del pueblo, que sustenta esta práctica dolosa con el ingrediente nepótico incluido, Carolina cuna del nepotismo Delia Muñiz la reina del nepotismo, que hasta sus mascotas laboran para el Municipio.

El “all inclusive” o “todo incluído”, no solo se practica en las ofertas turísticas, sino también en las ofertas políticas, a cambio de inmunidad, impunidad, protección, nepotismo y hasta una pensión asegurada. Las nuevas generaciones heredan un sistema permeado por el dolo y la prostitución en todas sus manifestaciones, lo que las hace presas de la descomposición moral, donde el sicariato ha encontrado su espacio en la defensa de capitales oscuros.

El país se aboca para su estabilidad futura a crear un movimiento de hombres y mujeres comprometidos en enarbolar los valores Boricuas, no sólo en las elecciones venideras por las camándulas personales y no el bien común, sino hacer respetar nuestra identidad Boricua en todos los meses del año, empezando con el más sagrado deber, luchar contra los corruptores de la sociedad, que es luchar contra los enemigos de la patria.

El ejemplo tiene que venir con el castigo a los traidores que han quitado el pan y la educación al pueblo, y han sido indiferentes por conveniencia al éxodo de Puertorriqueños a territorio de Los Estados Unidos, desuniendo la familia Boricua, un éxodo que mancilla el honor de los que dieron sus vidas por nuestra democracia y libertad en guerras en ultramar y nuestros antepasados viejos, que lucharon por crear un Puerto Rico Mejor, hoy convertida en un libertinaje, no sólo en el manejo de los recursos del Estado, sino también en detrimento del crecimiento en valores de nuestros recursos humanos.

Puerto Rico debe y tiene que reaccionar frente al engaño y la simulación, exigiendo sus reivindicaciones de crecimiento y sus derechos a la educación, Deportes para todos, salud y alimentación.

Enfrentar el negocio de el sicariato del narcotráfico y el narcoestado, respetar los recursos de las ayudas sociales para los pobres extremos que tenemos hoy día, respetar el fondo de pensiones de los trabajadores escamutiada en los sistemas de retiros del gobierno y de la empresa privada, respetar nuestra alianza y soberanía unidos indisolublemente a la Gran Nación Americana, tener austeridad y transparencia en el uso del patrimonio de todos y sobre todo, el respeto a la dignidad humana. ¡Parecería una utopía, pero es lo correcto!

A Luis Fortuño le digo que es una verdad comprobada que el buen desempeño económico refuerza la autoridad moral del Gobierno. Cuando los números son negativos inmediatamente se perciben, o, mejor dicho, se constata que la situación anda muy mal, y para muestra, un botón: 2004 ó 2008, cualquiera de estas dos fechas nos trae un recordatorio de susto y luto, sobresalto de los ciudadanos y todos estamos de acuerdo que la economía esta mala a nivel mundial.

Siempre se ha expresado que “los números hablan”, en consecuencia, cuando el gobernador Fortuño trata de explicar la recuperación económica de la Isla después de haberla recibido en estado expirante, no puede ser interpretado como un cortejo a la demagogia, porque el país está expuesto a una mayor vigilancia pública que obliga a las autoridades a mostrar cuidado al lidiar con cuestiones tan delicadas como son las funciones públicas aunque el Partido Popular Democratico, por demagogia, trata de decir que es embuste de Fortuño, la realidad es que Sila y Aníbal quebraron el pueblo de Puerto Rico.

Las fuertes críticas que se le han hecho a Luis Fortuño que lo tienen al borde del precipicio gubernamental muchos dicen que: “No se vive de números...”, y agregamos: “no es bueno querer callar, comprar, silenciar, manipular ni difamar al gobierno, nos parecen exageradas.

Plantear este pliego argumentario ante un ciudadano como Luis Fortuño de parte del PPD parece no tener justificación porque ninguno de los poderes que le hacen contrapeso al Ejecutivo puede alegar que ha habido algún intento dirigido a ello. Así que, arrimar la sardina a la actual administración solamente no es correcto ni la verdad, ya que sólo algunos jerarcas del Gobierno de Aníbal Acevedo Vilá del PPD participan al cotilleo morboso de grupos “insurreccionados” contra este Gobierno, denota una falta de comprensión de quienes son los verdaderos enemigos a combatir por este curato crítico que le acredita el pecado a quien precisamente no nos ha llevado a la quiebra de nuestra existencia como nación, eso es queriendo dar camandulas ajenas a Luis Fortuño e invito a que sean mas serios.

Si con números no se alimenta al pueblo, tampoco se logra con sermones. Luego del espaldarazo de fray Antón de Montesinos, con su famoso sermón de Adviento que aunque logró ablandar el entumecido corazón de aquella dama bienhechora que fue Isabel la Católica, no evitó que 25 años después no quedara vivo ningún infeliz de la inocencia indígena sometido en nombre de la ley primitiva de la conquista.

Me identifico con el criterio de que, para reducir el consumo de cualquier sustancia, no sirven campañas morales furiosas de abstinencia total, sino las de información y orientación, advirtiendo los riesgos. Igualmente, con que más dañino y peligroso que las drogas, son las armas y se pueden producir y exportar legalmente, dando poder a los mismos narcotraficantes.

Estos sermones de los predicadores del Partido Popular Democrático, buscando el castigo de los pecadores enviándolos al más allá como su lugar ideal (infierno, purgatorio y limbo) darán poco resultado, pues éstos han caído en desuso luego que Juan Pablo II dijera que el cielo y el infierno no son lugares físicos sino “la situación de quien se aparta de Dios”; igualmente Benedicto XVI nos dice que el purgatorio es un estado provisional de “purificación”, y además, que no existe el limbo, entonces es comprensible que los arrojados al “infierno” por los sermones quizá sufran menos que los que no disponen de los números, reales que mantienen a Puerto Rico en la quiebra Señores, hablen la verdad no traten de enga : en mas este pueblo que no es tonto.