PENSANDO EN LA ALCALDIA DE CAROLINA PARA EL 2012
Por
Jose Cheo Cruz
Carlos Rodríguez
Pardo, un hombre bueno e ingenuo, ante los ataques despiadados de los racistas de dentro y fuera del PNP, exclama que él ha volado sobre el
lodazal, pero que sus alas se mantienen “blancas, como la albura de las nieves
de los pinachos más altos”. Muchos años
tengo conociendo a Carlos Rodríguez, y aunque quienes no saben quién es creen
que es un hombre manso con “los ojos verde”
todos los que han estado con él, saben que Carlos Rodríguez Pardo lo
único que tiene es la decencia, pero no es de los sujetos que tienen miedo a
decir lo que piensan y a defenderlo. Carlos, y no es porque sea candidato a
alcalde de Carolina, no es un PNP cualquiera. Es un hombre de arraigadas convicciones
que primero piensa, y luego habla, pero no tiene miedo a hablar y hablar con
energía. Carlos jamás nadará en esta ciénaga, ni chapoteará, en el lodazal. Carlos discute, no insulta;
Carlos es tolerante y paciente, pero no es cobarde y es un hombre bueno. Pero a
Carlos Rodríguez nadie lo tuerce cuando él cree que están en su partido y que
andaban con Coquito hoy día, y hoy
todavía usan los vehículos que no embargo el gobierno Federal a el
narcotraficante, para esa gente Coquito Vive y es un honorable como me dijeron.
Carlos Rodríguez no navegará en la piscina de estiércol en que cayeron en el
Narco Estado Héctor Martínez, Lorna Soto, Eric Correa, Epi Jiménez y muchos
otros que yo no perdono no se usted porque
eso es propio de canallas, no de gente que respeta y se respeta).
Pero Carlos llevarse
del ‘lenguaraje’ y la palabra embarrada de mierderia y prepotencia sin
conocimiento alguno de causas del estratega de tu campana el Policía Municipal
Juan Carlos Cana “el viudo de Tito Rico” al decir la mas garrafal mentira a los
Policías Municipales de que me botaron
porque me robe dinero de tu campana es la de acabar y se que no es de tu parte
Carlos es de este bribon tránsfuga proveniente del lambeojismo perseguidor y
mentiroso de Apontelandia e infiltrado aquí adentro, y que mintió en un
Tribunal Federal para proteger a su pana negrito Sargento, le advierto que eso
no ha caducado lo podemos retrotraer de nuevo al FBI el mentirle a un gran
jurado . para que se lo termine de llevar el mismísimo diablo. Ni es político
ni personal es una difamación de marca mayor. Carlos Rodríguez y su esposa
Milly., lo saben. ¡Los ciudadanos como el que escribe, sólo aspiramos a un
país y pueblo de Carolina decente.
¡Ojalá estemos gobernados por Don Carlos Rodríguez Pardo y su moral de
hierro! Pero ¡Vamos a respetarnos! Eso
es lo primero.
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