LA DEGENERACION Y PROSTITUCION POLITICA

Por Redacción de Radio el Faropr.com

Dicen por ahí, que al que no quiere del caldo, le dan cuatro tres tazas,  con la agravante de haber sido victimas de una sobre dosis de la medicina amarga que mantiene a este País encamado y en estado comatoso. Nada más que ver el estilo de campaña sucia que se ha venido llevando a cabo desde las trincheras del PNP y del PPD, en la que se valen de todos los recursos, hasta la colocación de bombas sucias contra la moral y reputación ajena. Se dispara a mansalva y sin discreción, sin que nadie del PNP y PPD tome control de la situación en términos de elevar el debate hacia la solución a los verdaderos conflictos existenciales que nos agobian de día a día como Pueblo. 

La conducta torcida que han demostrado los dos principales partidos (PNP-PPD) con relación a las acciones fraudulentas cometidas en los pasados comicios primaristas por sus huestes, ponen de manifiesto la corrupción rampante que existe en ambos partidos, porque aquí nadie sabe con certeza quién es más delincuente y ladrón que quién. Vimos como todo un Tribunal Supremo, no quiso intervenir en esa inmundicia ni con una vara larga, para no correr el riesgo de mancillar el buen nombre de esa institución porque eso era como intentar desactivar con los ojos vendados una granada de fragmentación. Con todo el respeto que se merecen, ninguno de esos jueces, ha pertenecido, ni pertenecen al Club de Los Pendejos y ellos saben muy bien como nadar y guardar la toga sin mojarse.

Estamos viendo como salen a la luz pública los millonarios contratos otorgados a Ángel Cintrón, Director de Campaña de Luis Fortuño y del PNP por la suma de $1,669.892.00 y en el PPD  a Irving Faccio & Pabón por $5,995,873.25, lo que demuestra que esto se trata de una cofradía elitista.  No vamos a hablar de los millonarios contratos que hay con las agencias de publicidad y que tienen otros allegados al poder en las estructuras políticas de ambos partidos, algunos de ellos plagados con visos de ilegalidad. El dinero corre a raudales como el agua, y  las crápulas políticas que hay en este País, se empeñan en practicar el vampirismo para drenar las arcas públicas a como dé a lugar para buscar su parte de la presa.

La debilidad de esos fascinerosos cede, ante el poder y el interés económico que puede más que la moral y la vergüenza que ellos poseen. La historia no miente, a fin de cuentas hemos visto como políticos de renombre han cambiado de la noche a la mañana de partido, o sea los tranfugas, ya sea por las conveniencias personales y/o económicas  de posicionarse ventajosamente. Aquí en este País capitalizado, ya no cuentan los ideales del hombre porque se ha hecho de la política una industria comparable a las extintas 936. A  los políticos que son serios, que son muy pocos, se sorprenden cuando muchos de sus propios compañeros les dan la espalda. Ya los políticos serios y honestos, constituyen una especie en peligro de extinción.

Detrás de todo el aparataje  que se mueve en esa turbia industria, las campañas electorales son lucrativas para los activistas de los medios de comunicación, agencias de publicidad, concesionarios de vehículos, combustibles , banners, banderas, cruza calles y toda la parafernalia que se utiliza para correr una campaña política en ese siniestro mundo. Los pocos aspirantes o políticos serios que pudiera haber en este País, no tienen nada que buscar en ese obscuro mundo de inmundicias y de crisis de valores. Muy tristemente esa es nuestra realidad en la que vivimos y que debemos aprender a aceptar porque yo no creo que esto vaya a cambiar para nada, venga quién venga.

Ahora el asunto que preocupa más a la atención pública es la foto del candidato a Comisionado Residente, Rafael Cox Alomar. Qué pequeños son, ponerse con esa cafreria de estar haciendo imputaciones de ambos lados. No hay madurez política en este País, tan lleno de problemas de desigualdad e injusticia social a que nos han sometido. Que si en este País hay racismo, pues claro que los hay, dentro del PPD y el PNP, porque somos una sociedad hipócrita y en decadencia que pretende barrer y ocultar el sucio debajo de la alfombra.

Ambos partidos, el (PNP-PPD) han sido históricamente los mayores enemigos de la verdad y la justicia social, y han escogido el camino de la deshonestidad y las mentiras para mantenernos dócilmente doblegados y anestesiados con sus falsas quimeras y engaños, que solo pretenden enriquecer los bolsillos de unos pocos más hábiles y astutos a expensas del mal de muchos tontos y fanáticos. Es por eso que la política hoy en día atraviesa por su peor momento al haber sido degenerada y prostituida solo para el beneficio de unos pocos y no de los que hemos sudao esta Patria de a verdad, conociendo de propio y personal conocimiento la cara del hambre y la pobreza.