¡Honor a los Héroes Retirados, y Desprecio a los Eñangotados!


Redacción de Radio El faro 

Hoy llegan noticias de la Barra de Caneco donde el mierdero es cada día más apestoso. Supimos por parte de uno de los buenos amigos de mantenimiento de jardines, que el monigote de mandao y represión Luis “El Titanic”Castro, esta que si lo cortan no bota sangre. Su pataleta viene del desprecio de Caneco a su persona al no proponerlo para Empleado del Ano. Como denunciáramos en un artículo, la Abdula de Caneco Savinovich, fue la merecedora del galardón. Al Titanic de Sabana Abajo que se dedico a perseguir, represar y hostigar laboralmente a los trabajadores a cambio de merecer Villas y Castillas de parte del  paquetero de marca mayor, Víctor Rodríguez Mangual (Caneco), hoy después de tanto maltrato no tiene puesto de Director, Galardones de servidor y mucho menos el aprecio del trabajador. ¿Oye, valió la pena pintarte como el malo de la película? Pero es irónico que con tu falta de reconocimiento hayas traído alegría a los trabajadores. Ya no dependen solo del cuento que tu canoa cogió mas agua que el Titanic cuando pescabas por esos mundos de Dios, ahora tu ridículo basta y sobra.

En otras materias, nos cuentan que esta mañana corrió el cuento en la Barra de Caneco, que por fin le rindieron un merecido reconocimiento a un grupo de buenos trabajadores en su retiro. Estos héroes de otra época, porque en la actual fueron tratados como un mojón más en el pozo muro, sirvieron por varias administraciones, algunos de ellos desde Manolo Corujo, dando una verdadera cátedra de servicio público. Dio gusto ver a Caneco hablando sobre las virtudes de estos empleados y estos correspondiéndoles con agradecimiento genuino. ¿Será esto posible? ¡Pues, no! Si alguien no estuvo allí fue el hombre más querido de Obras Públicas, Filipinas y la Policía de Loiza. “No hizo falta ese pendejo”, nos relato un buen amigo que tuvo detalles del evento por uno de los presentes que lo relato en el estacionamiento esta mañana. “Hasta a Papo Hernández reconocieron.”.

¿Qué ha provocado, que como en la época de la inquisición, la gente humilde tenga que festejar a espaldas del opresor? Cuando murió Manolo Corujo, muchos indicaron con indignación que no se le había dado el reconocimiento a un Alcalde que trataba a todos de frente y no a través de terceros. Los trabajadores trabajaban con gusto y desinterés porque Manolo estaba ahí con ellos Hasta el difunto Miquelón Jose E. Aponte de La Torre, en sus primeros años de administración, hablaba personalmente con sus obreros y en controversias decidía justamente. Continuo el buen amigo narrando que, el difunto conocía y apreciaba a muchos de los allí presentes. “Imagínate, que el Alcalde en su ultima de actividad del trabajador, le puso el botón colorao a Papo. Y Salvita salía siempre en las fotos de cheques. En una de esas yo estuve y cuando vio a Salvita lo saludo como a un viejo amigo. ¿Tú crees que es mariquita que tenemos sabe quienes son Papo, Salvita, Tono Falu?”. Con el tiempo y la llegada de terceros e intermediarios con sed de poder, se perdió en Carolina lo que era un Alcalde de pueblo. Ahora tenemos un Principito que quiere mucha langosta, pero que no se moja el Trasero  para obternerlas, pero se lo mojan otros en sus andadas. Bueno aunque dicen que en Culebra cuando se va con la ganga a beber en el negocio del Chapu, el de la pista y el de las Pinas Coladas, se le inunda la raja del tracero. ¡Que vergüenza de Alcalde! El que tenemos ahora.
El hecho es que hoy en Obras Publicas se está cosechando lo que se ha sembrado. Cada vez son menos los alcahuetes, los enangostaos se están poniendo en pie de guerra por el desprecio. La guerra entre el bando de la “Chica Clairol”y la Colora, contra las querendonas de la Vieja Guardia  es cada día peor. “¡Ya no hay la Familia de Obras Publicas!”

Para cerrar queremos felicitar a esos valientes y grandes seres humanos que tomaron la iniciativa de hacer lo que el opresor no hizo. Reconocer humildemente a los héroes del servicio público. Nos pidieron que no los mencionáramos para que no tomaran acciones contra ellos aunque ya sabemos que hoy son tratados como lo peor. Y la primera dama, que tanto le debe a estos marginados, se llena la boca diciendo, “mi gente de obras Publicas”. En bonitas manos dejaste Obras Publicas. Verdaderamente Carolina está a otro nivel.

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