¿QUE NOS DEPARARA EL 2013?
Por Redacción de Radio El Faropr.com
Acabamos de empezar el 2013, y hoy martes 1 de enero de 2013, tal y como lo habíamos
anticipado ya la ola criminal ha cegado
la vida de unas seis victimas en menos de 12 hrs. Coincide este desagradable hecho con la
antesala de la llegada de una “nueva” administración que tendrá a su cargo el
gran peso de tener que lidiar con esta situación que incide en lo profundo del
sentimiento y la calidad de vida de todos los que vivimos inseguros y apretados
en este país, ocupados por los sicarios y carteles que no los han hecho
chiquito, Puerto Rico se vive en un narcos estado sin duda.
Todo el país vive bajo una expectativa de inestabilidad y cuando salimos
a la calle se sienten esas malas vibraciones,
en la carretera tan pronto usted toma el volante de su auto o se allega
a algún lugar público. Ya la intolerancia y la paciencia, en este país pasó a
mejor vida y vivimos a base del más que
empuje y aquel que más hierros tenga encima para imponerse a fuerza de metralla
y balas.
Tenemos muchos factores multi-factoriales que socialmente han
contribuido enormemente a patrocinar todo este estado de anarquía y narco
estado en que vivimos, la injusticia social, la desigualdad abismal entre ricos
y pobres y entre privilegiados del gobierno los Tarros políticos y la creación
de una cultura de dependencia fomentada por los que tradicionalmente han
gobernado a este país (PPD-PNP) solo para ellos tener una forma de captación
política controlada, que respondan siempre
a sus mejores intereses y no a los del pueblo en si, ya Jaime Perellot
ha nombrado un montón de gente de Carolina miembros del PPD los que piensan
distinto no tienen cabida sin lugar a duda es mas de lo mismo el uno u el otro ¿Cuál
es el cambio? ¿El quítate tu pa’ ponerme yo?, Esa es la pregunta.
Este pueblo nunca ha valorado la imperante necesidad de combatir el
flagelo de la corrupción en los estamentos del estado, donde un exclusivo grupo
de “guaynabitos y doraditos” depende el color con que se victan, de clases
acaudaladas que han vivido toda la vida
de la política para nutrir y engrosar sus arcas de nuestro caudal publico. El
día en que este pueblo tome conciencia sobre este malabarismo y la ilusión
óptica a que nos han sometido por más de 60 años, se habrá de acabar el
“macuteo” de unos pocos, en detrimento de muchos. Mientras sigan eligiendo a
estos partidos que se han atornillado al control absoluto del poder político
compartido este país estará avocado al fracaso. Vemos como la administración
entrante ya ha emprendido su “take off’ en un vuelo atestado y sobrecargado con
un solo motor funcionando a media capacidad, ustedes saben el resto y las
consecuencias que emprender ese vuelo
acarrea.
Vivimos en una lucha de clases, en donde todos los que nos han gobernado
no han respetado tan siquiera nuestra propia constitución como instrumento de
un pueblo a defenderse del poder gubernamental , represivo y mal usado de forma arbitraria, abusiva e
intolerante a las críticas. Lo que nos espera
en estos próximos cuatro años, no va a ser fácil, tendremos de nuevo que
hacer garganta para asimilar otra medicina amarga, esta vez unida a un supositorio que nos
dolerá hasta la Tambora, porque los que vienen no piensen que ya tienen sus
planes. Ellos van a seguir exprimiéndonos, ellos no nos vienen a dar, sino a
quitar todo lo que nos puedan quitar de lo poquito que nos dejaron los que se
fueron y se marcharon a hurtadillas.
Los ricos vs. Los pobres en un sistema de justicia disfuncional totalmente inclinado y orientado para que
prevalezca aquel que goza del prestigio
y la posición acomodaticia que brinda el poder económico. El crimen seguirá en
escalada, la economía en desfase, el
desempleo habrá de rebasar todas las proyecciones negativas para nuestra economía jamás contempladas, en
fin lo que se avecina es una crisis de marca mayor. La lucha continua y todos tenemos que
ajustarnos la cintura para poder sobrevivir y estar con ojo avizor para
detectar y denunciar todas las faltas que se cometan en este nuevo juego y así
estaremos firmes al pie del cañón, sin
esperar nada a cambio, porque en esta lucha no le
cargamos el bulto a nadie.
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