LOS QUE NO ES IGUAL ES VENTAJA
Por Redacción de Radio El faropr.com
En
el día de hoy, se han formulado acusaciones contra 29 funcionarios del
Municipio de Guaynabo, de la Cámara de Representante y de la policía de Puerto
Rico, contra estos en total se presentaron 110 cargos graves por apropiación ilegal de
identidad, falsedad ideológica, archivo de documentos o datos falsos y
perjurio. Estos delitos son de cuarto grado y, según el Código Penal, conllevan
una pena de seis meses y un día hasta tres años de cárcel. Todos estos delitos
cualifican para probatoria, todas estas acusaciones son por el supuesto fraude
cometido por militantes del Partido Nuevo Progresista en las primarias del
pasado 18 de marzo de 2012. Este medio condena enérgicamente ese tipo de
actuaciones que van en detrimento de los electores y sobre esto nos hemos
manifestado en el pasado y nos reiteramos en nuestra posición al respecto.
Este
mega-fraude electoral, fue montado desde las entrañas del alto liderato del PNP
en Guaynabo, para beneficiar la candidatura del candidato preferido del Alcalde
Héctor O’Neill, producto del maldito caciquismo político de los que se aferran
en el poder y luego se creen los dioses del olimpo que tanto hemos criticado.
Este medio no distingue si es PNP o PPD, quien sea que obre contrario a la ley
debe atenerse a las consecuencias de sus actos y aquí no somos filtros de
nadie, ni lavamos las mugrosas caras de los corruptos de oficio que hay en este
país y que militan en ambos partidos, claro todos los acusados hoy se presumen
inocentes y el gobierno tiene que probar su caso.
Como
se ha dicho esto fue parte de una conspiración perpetrada para arrebatarle el
puesto al Representante Ángel Pérez,
quien cayó en desgracia con el Alcalde O’Neill.
La disidencia y el disentir del Representante Ángel Pérez , le costó que le tiraran en primarias a
uno de sus espalderos y aduladores incondicionales del Alcalde O’Neill, al
“Honorable” Antonio (Tony) Soto, actual Representante a la Cámara y eso que son
demócratas eso es caciquismo puro.
Si
como se dice en las acusaciones esos 29 bobos funcionales, se prestaron para
hacerle el juego al Cacique Mayor de Guaynabo, que les caiga todo el peso y
rigor de la ley y que los pasen por la piedra, para que aprendan.
Miren
mi gente si en este país vamos a meter presos a todos los que violan las leyes
electorales, no habrán cárceles en Puerto Rico para albergarlos a todos.
Tomemos el caso del PPD, que inflaron los resultados en esas mismas primarias
en el precinto #65 unidades 8, 9 y 11 cuyos maletines fueron arrestados por la
CEE. En todos esos colegios los votos
favorecieron a los dos candidatos a Senadores que eran los favoritos del
Alcalde de ese pueblo. En la unidad #12, un perito calígrafo determino que las
firmas habían sido falsificadas y que no correspondían a los electores que
aparecían votando.
En
otros colegios que se cometieron irregularidades en las primarias del PPD,
fueron en la unidad # 8 de Guaynabo donde habían inscritos 151 electores y aparecieron votando 280 electores, en la
unidad #6 de Lares aparecieron 176 electores votando, cuando solamente habían
96 electores inscritos y en la unidad #14 de Adjuntas aparecieron unos 37 votos
que no fueron incluidos bajo ninguna circunstancia en el acta de votación
oficial.
Les
recomendamos a las autoridades que si de veras tanto interés tienen en este
asunto que también investiguen en Carolina todas las transferencias fatulas de
un precinto a otro y los vaciados de listas y apropiaciones de identidades
fraudulentas que se hicieron en esas primarias para favorecer a los candidatos
impuestos por el Alcalde José Carlos Aponte, el King Jung-un de Carolina,
favoreciendo a su hermano Javier Aponte, a Luis Daniel el gato Montes, y a
Pedrito al Senado.
En
este medio hemos estado alertando sobre el mismo esquema de fraude electoral
utilizado en Guaynabo, pero mucho más estilizado y discreto, pero a fin de
cuentas obtuvo el mismo objetivo, robarles los votos a otros candidatos para
favorecer la plancha del Alcalde.
Si
en realidad se quiere hacer justicia, sería bueno que se aprovechara ahora y se limpiara este país de los ladrones
y malamañosos, indistintamente de que partido sean militantes. Eso sería lo
ideal y lo lógico pero sabemos que por razones políticas el gobierno no
funciona así y se apresta a encubrir y a darles
impunidad total a sus correligionarios del PPD, tal y como también lo ha
hecho el PNP en el pasado.
En
este país no hay integridad, ni moral en ambos partidos, porque todo se ve
desde una óptica política y con un fanatismo desenfrenado a la novena potencia.
Es por eso que ya tocamos fondo y no sabemos cómo ascender a la superficie. Más
temprano que tarde el amo del norte de la metrópolis, nos pondrá en sindicatura
por nuestra propia incapacidad de poder gobernarnos con dignidad y justicia,
sin tomar en cuenta nuestra condición social, color de piel y afiliación
política o religiosa. Aquí no se respeta nada de eso, porque la intolerancia
nos gobierna desde distintos extremos y eso se ve y se palpa en la calle.
Vivimos
en una confusión y enredo de espíritu que no sabemos para donde vamos y que
queremos. Muchos niegan sus raíces y piensan que vivimos en un continente
autónomo, porque nunca han querido interiorizar que somos la más antigua
colonia del hemisferio norte, muchos hacen como el avestruz que meten la cabeza
en tierra.
Lo
que está pasando en Guaynabo, Villalba, Carolina y en todo Puerto Rico es el
deterioro moral y la conducta torcida de quienes pretenden perpetuarse en el
poder a como dé lugar y sin importar después quienes tengan que pagar las
consecuencias. Como este es el país del conformismo y la complicidad de muchos
que no se atreven a decir las cosas como son y de frente, los políticos
corruptos encuentran terreno fértil y nos llevan como caña pa’l ingenio rumbo al trapiche pa’ ellos beberse
el melao y dejarnos el bagazo.
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