LA MUERTE A UN PASO DE LA VIDA

Por Redacción de Radio ElFaropr.com

Nuestras fuentes nos informan que el miércoles 30 de octubre de 2013, durante horas laborables y utilizando vehículos oficiales el  Principito José Carlos Aponte, Alcalde de carolina organizo un “media tour” donde fueron trasladados un grupo de unos 30 Supervisores y empleados del departamento de manejos de desperdicios sólidos con destino hacia el tercer piso del hospital auxilio mutuo (Sala de Pacientes- Oncología) donde está recluida Delia Muñiz.

Dicen que desde su cama Delia Muñiz, se quitó las mangas que tenia instaladas y comenzó a vociferar que “aquellos que le están deseando la muerte, se van a quedar con las ganas . . .  porque hay Delia Muñiz, para buen rato” en un claro ejercicio subliminal de intimidación y supremacía.  Que sepamos a ella nadie en este medio le ha deseado su muerte, pues eso solo está en manos del creador que es el que nos da la vida y no las quita solo cuando el disponga.  A todos nosotros los seres que somos mortales, algún día nos tocara la muerte como un ciclo natural de vida en este mundo porque no somos inmortales. En este planeta todo lo que nace, muere y todo lo que sube baja esas son las leyes de física que nadie puede cambiar, solo Dios como Ser Supremo.

 Esas actitudes y maneras de pensar solo habitan en unas mentes retrógradas, toxicas, fermentadas y malvadas que juzgan a base de la propia maldad que emana del interior de su alma. Ese problema existencial de resentimiento que habita en su corazón y que ha sido su suero de vida se ha visto traducido en toda la estela del mal que ha dejado a su paso y los daños irreparables que ha ocasionado a muchas personas en carolina.  Como dice una canción, las penas del alma, no se acaban nunca de pagar y uno indistintamente de la situación en que se encuentre deberá asumir las consecuencias de sus actos, errores y fracasos a su paso transitorio por este planeta y para eso hay que tener primero temor de Dios y sobre todo dignidad.

 Quizás esa pueda ser el último grito de guerra y de maldición lanzado por la matriarca de la maldad que ha sostenido por más de 28 años con vida al régimen Apontista.  Desde que ese ser puso un pie en ese municipio donde se le rinde culto y pleitesías como si fuese el lucero de la mañana.  La señal es clara y ya en el régimen comienzan a surgir las grandes grietas con un fuerte olor a azufre y a descorrerse el manto protector que lo hacía infalible. El tiempo será nuestro mejor aliado y testigo porque a fin de cuentas todo lo que empieza termina, nada es eterno solo la muerte de los que por sus malas acciones no deban regresar a este plano por decreto Supremo.