TRATO PREFERENCIAL EN MUNICIPIO DE CAROLINAPARA JUAN ORTIZ CRESPO

Por Redacción de Radio El Faropr.com

A media mañana del pasado lunes 4 de noviembre de 2013, fue notificado por escrito  un empleado del municipio de San Juan, en donde se le informo sobre su suspensión inmediata en sus funciones y su posible despido por la acción de haber dispuesto de un vehículo oficial sin la debida autorización en ley para ello. Dicho empleado es un Supervisor de Brigada, destacado como coordinador en el área de reparaciones de vehículos municipales con talleres privados.

La Alcaldesa Carmen yulín Cruz Soto, indico que se espera tomar medidas disciplinarias contra ese empleado con carácter de urgencia y todo el proceso conllevará una vista administrativa que se llevaría a cabo en las próximas 48 horas. Indicó además que hace 3 semanas atrás, fue destituido un trabajador de brigadas que se apropio ilegalmente de un “trimmer” propiedad del municipio.

Traemos como ejemplo este caso donde contrasta marcadamente con  la actitud de laxitud  y los recursos de encubrimiento que han tratado de poner en práctica las autoridades del municipio de carolina en un caso criminal peor que el ocurrido en el municipio de San Juan. El Alcalde de Carolina José Carlos Aponte ha recurrido a todas las tácticas para establecer todas las coartadas habidas y por haber para tratar de encubrir las acciones criminales de su Jefe de Seguridad, Juan Ortiz Crespo a quien se investiga por violar y sodomizar a una empleada municipal durante su horario regular de trabajo y en unas instalaciones públicas.

Ya hace un tiempo atrás veníamos denunciando la conducta desordenada y torcida de ese individuo quien ha estado actuando como los cabros sin ley ha dejado una estela de destrucción a su paso por el área de seguridad pública, gracias a la impunidad y protección absoluta que le brinda  su amigo el Alcalde, “el principito” José Carlos Aponte.

A la hora de esta gente fabricar las mentiras se las inventan en el aire y se las sacan de la manga. Todos ellos juntos se especializan en el arte de mentir y torcer la verdad porque toda la vida y un día más siempre han sido unos mentirosos compulsivos y patológicos. Esa gente toda la vida ha vivido de los chanchullos en cuartos obscuros.  Ellos nos son lo que aparentan ser como personas que ocupan posiciones que demanda un nivel de moral, honor y dignidad.

Para qué ese municipio gasta cientos de miles de dólares en campañas y promociones con caminatas donde compran camisetas y banderines, gorras, banners y toda una parafernalia costosa para proyectar ante el pueblo que hay que ayudar  a las mujeres víctimas de la violencia. Por otro lado pretenden encubrir esos repugnantes hechos cuando los mismos surgen en su propia casa y asumen otro discurso distinto donde pretenden barrer el sucio y colocarlo bajo la alfombra de su casa. Como dice el refrán: “En casa del herrero, cuchillo de palo”.

La actitud de todos ellos es una de extrema negación de los hechos y hasta la Lcda. Carmen Longoria, Directora de la División Legal del municipio ha tenido la osadía y falta de sensibilidad humana de haber hecho expresiones públicas que denotan que están prejuiciados y parcializados  a favor del victimario. No faltaba más hombre, que se podía esperar de esos espalderos que se prestan hasta para cargarle las maletas al mismo enemigo de las almas.

Dejemos que el proceso corra y siga su curso ante la justicia, aunque el Principito José Carlos Aponte, se burle y alardee de su poder de poder comprar todo y hasta pensar que el tiene el sartén de la justica de este país agarrada por el mango para seguir protegiendo a su ahijado preferido no importa que este se haya comportado como un depredador sexual  y tenga a su haber situaciones que han contribuido a deformar la imagen prístina y transparente que debe proyectar un servidor público que representa la Ley y el Orden.

Nadie es culpable hasta que se le pruebe lo contrario, más allá de cualquier duda razonable, como tan poco lo es inocente hasta que pruebe su inocencia, conforme al peso de la prueba pericial y testigos que se presenten en el caso. Principito, no siga cantando victoria a los siete vientos, porque estamos entrando en la época Navideña donde a cada cerdo le llega su noche buena.