CUANDO LA VERDAD RECLAMA JUSTICIA

Por Redacción de Radio El Faropr,com

Seguimos con el  tema obligado del caso de El Caneco, Víctor Rodríguez Mangual, quien nos informan está acorralado y desesperado, porque ya ha comenzado a salir a la luz pública, la punta del Tempano que se mantuvo calladito y como el secreto mejor guardado por más de 34 años.

Este individuo tiene que controlar sus emociones y tener sumo cuidado en presencia de quien o quienes, difunde sus palabras con saña y odio. El tipo no debe estar diciendo barrabasadas y   lanzando comentarios despectivos de corte racista contra los que hemos divulgado la verdad. Aunque nos llame negros y nos insulten y nos desacrediten nuestro esfuerzo no se detendrá. No todos los que el pueda creer que están de su lado, lo están para proteger sus malvados intereses. El Caneco debe tener presente que un secreto entre dos, nunca será un secreto y debe evitar actuar como un boca e’ burro suelto y al garete.

El tiene que tener cuidado con lo que hace y dice porque el que explica a veces complica. Sabemos que en el pasado El Caneco ha intentado tener “Affairs” amorosos con algunas empleadas que están bajo su supervisión y a una de ellas le propuso que estaba dispuesto a “calzarla”.  El Caneco en su fantasía y delirio interno de pretender jugar a ser un macho cabrío  y  a un semental, da rienda suelta  a su implacable sed insaciable de venganza, estimulando la persecución y el asecho hacia sus víctimas más débiles. 

A este individuo lo menos que deben hacer las autoridades municipales, si es que tienen un poco de vergüenza y pudor, es enviarlo a que le hagan un evaluación psicológica. A la administración Municipal de carolina, le corresponde el deber de que a todos sus empleados se le garantice el que puedan laborar en un ambiente de trabajo digno y seguro. Si él no puede controlarse entonces es mejor que el siga dándose  los masajitos extraños, esos que a él le gustan que le den por allá en el área de Isla Verde para que controle sus instintos y sobre todo su descontrolada testosterona. 

Con las acciones que ha cometido en el pasado, este soberano canalla y delincuente que no es más que un racista empedernido y un depredador sexual con placa que estuvo infiltrado en la Policía de Puerto Rico, obrando al margen de la ley.  Este desaprensivo  fue el mismo que actuó como un depredador sexual de una niña de 13 años en un lugar apartado (3T) en el pueblo de Rio Grande. Gente de poca monta moral como este individuo, deshonra y desprestigia el servicio público. Sus despreciables acciones lo han delatado y le  imposibilitan de ocupar cualquier cargo en el sistema público de este País. 

En el caso de El Caneco,Victor Rodriguez Mangual, haya hecho un arreglo extrajudicial para resarcir los daños ocasionados y el haya optado por renunciar a la policía antes de que procedieran con su expulsión, NO le libraba de las responsabilidades que debía asumir por las consecuencias de sus actos. Teniendo ese nebuloso y manchado historial, hay que preguntarse cómo es que este tipo, no fue incluido en un registro de depredares sexuales de menores y como se ha mantenido laborando en el servicio público. Que sepamos ese individuo  tan siquiera hay constancia escrita de que haya pasado por un proceso de rehabilitación que demuestre su insanidad mental lo que es mandatorio por ley.

Este caso de El Caneco, pica y se extiende, porque es mucho peor que el del excapitán  de la Policía Hilton Cordero, quien esta cumpliendo prisión, aún cuando solo se trató de un acto de pornografía y de acoso sexual donde se alegó que nunca hubo contacto físico con las víctimas del caso.  

En el caso de El Caneco el mismo pliego acusatorio que desfiló como prueba en su contra en la vista administrativa que llevó a cabo la Policía de Puerto Rico durante los días 15 y 16 de septiembre de 1982, recogieron los hechos que le fueron imputados y confirmaron tácitamente que en efecto hubo relaciones sexuales con la menor. 

Este individuo fue apresado y presentado ante un Tribunal que determinó causa probable y le impuso fianza por la comisión de los hechos imputados bajo la causal de una Violación Técnica contra esa menor.

Como cuestión de hechos hay que mencionar que la Ley de Etica Gubernamental dispone en su artículo (D)  que serán actos contrarios a la ley lo siguiente:

“Toda conducta hostil al bienestar público en general, inclusive aquella conducta reñida con la rectitud o que sea indicativa de corrupción, indecencia, depravación o de actitud licenciosa o conducta deliberada o flagrante y desvergonzada, indicativa de indiferencia moral hacia la opinión de los miembros respetables de una comunidad o la actitud desconsiderada con respeto al buen orden y bienestar público”.

¿Cómo es posible que este individuo este ocupando un cargo en el servicio público?

¿Quiénes han venido protegiendo a este individuo y encubriendo estos hechos durante todo este tiempo?

Es evidente que en este caso ha habido un grave fallo del sistema de justicia y hasta cierto punto una fase de encubrimiento de marca mayor de quienes no quieren tocar este asunto, ni con una vara larga. Corresponde ahora a las autoridades municipales, si es que quieren estar claros y con las manos limpias, el hacer valer la ley en este caso conforme a nuestro ordenamiento jurídico y estado de derecho que sea aplicable. 

A la Oficina de Etica Gubernamental, la emplazamos públicamente para que ejerza de sus buenos oficios y dé curso a la investigación de lugar, sobre el historial y los antecedentes laborales que ha venido arrastrando este individuo que debería estar tras las rejas hace mucho tiempo atrás. Emplazados quedan todos y en sus manos está este asunto.

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