SIGUE ANGEL “BORI” GONZALEZ VIOLANDO LA LEY.

Por José Cheo Cruz

El Alcalde de Rio Grande, Ángel (Boris) González, es una persona temeraria que incumple y desacata continuamente la ley de Puerto Rico sin recato alguno. Recientemente extendió un nombramiento de carácter transitorio a un empleado de nombre Héctor L. Rivera Rivera el amigo con privilegio del alcalde y quienes se van solitos para el área metropolitana a buscar cosas extrañas.  El nombramiento transitorio de dicho empleado se hizo bajo la presente veda electoral y no se sabe si el mismo cumple con las disposiciones de ley que prohíben tácitamente este tipo de transacciones de personal.

A este lo han asignado al centro de Envejecientes, Jardín El Yunque, según anotación escrita a mano en el informe de cambio de nombramiento, pero con asiento en la pista atlética.  Que lo firma el Alcalde y el empleado en cuestión. Dicho documento no indica de que partida se va a sufragar el sueldo que este empleado habrá de devengar, así como no establece periodo de efectividad y otra información que antes de que el Alcalde la firme debe estar ahí. La norma y costumbre es que un documento de esa naturaleza debe constatarse toda su información por razones obvias de sana administración pública. Mire Alcalde, usted también ahí en ese municipio acaso acostumbra a firmar los cheques en blanco que usa para pagar estudios y comprar gomas. Como usted no va a tener graves señalamientos administrativos si usted es el primero que anda al garete en el desempeño de su gestión pública.

Mi gente si, así es que este incompetente y corrupto Alcalde, firma los documentos del municipio a lo loco, claro que tienen que haber problemas a granel.  

A este, Héctor Rivera Rivera lo han puesto como jefe de operaciones en la pista de atletismo y el gimnasio municipal con un nombramiento de Trabajador I y un sueldo de unos $1,129.00 dólares mensuales y no tiene la preparación necesaria, ni académica ni de experiencia para ser un personal training o velar por la seguridad de los usuarios. Según documento que obra en nuestro poder y que fue cumplimentado parcialmente donde hay muchos espacios en blanco. En la pista ya hay varios empleados que trinan y están encocorados con la llegada de este nuevo “Jefecito de Cartón” al cual le han otorgado un nombramiento “de facto” e ilegal porque el mismo no ésta cónsono con la descripción de tareas y las especificaciones de clase del puesto que debe realizar un administrador de un complejo deportivo de esa naturaleza, teniendo atletas y personal de prestigio deportivo allí, que le han dado nombre y lustre a Rio Grande y no los nombras. Alcalde, los empleados transitorios solo son necesarios, cuando surja la necesidad de sustituir a un empleado regular en sus funciones cuando este se vea obligado a tomar una licencia sin sueldo y/o por motivos de enfermedad.

Los empleados transitorios no deben realizar tareas de duración fija que rebasen más de un año o de lo contrario lo tendría que nombrar en un puesto regular. Cuantos empleados de contrato tiene usted y que no fueron considerados para esa posición. Cuantos empleados transitorios tiene en su nómina que ya llevan años esperando un cambio de estatus a una plaza regular.

Esta es otra prueba más de cómo se ha prostituido y se ha degradado el sistema de mérito en el Municipio de Rio Grande bajo la incumbencia de Ángel “Boris” González, donde se supone que sean seleccionados a ocupar los puestos los más cualificados y aptos para ejecutar las funciones y responsabilidades que le han sido delegadas y no por capricho del dedo y el patronazgo político del PPD.

Sería bueno saber, si en ese Municipio se mantiene un registro de elegibles al día y si sus empleados son evaluados periódicamente para fomentar una libre competencia entre los aspirantes a cargos y posiciones públicas que surjan en ese Municipio, cosa que dudamos mucho, toda vez que la directora de personal Leysa Sánchez Ortiz es una que viola la ley de personal constantemente. Siempre se les debe dar prioridad a que los empleados puedan superarse y aspirar a posiciones que surjan vacantes y no el darle oportunidad y la primera opción a los de la calle o sus panitas del alma.