LOS CARTELES DEL PETROLEO Y EL ASFALTO
Por José Cheo Cruz
Durante los últimos días, mucho se ha hablado a
“vox populi” de los carteles del Petróleo y del Asfalto que operan en las
esferas estatales y municipales en el gobierno de Puerto Rico.
Harto sabido es, que las empresas que se dedican
a este tipo de actividad, son los mogules que financian las campañas políticas
y por otro lado también reparten sus ganancias entre sus colaboradores
encargados de abrirles el camino hacia los jugosos contratos y cobrarles el
peaje.
Los hoyos en las carreteras y la venta de
combustible (Bunker C) para producir energía son un negocio redondo y la
gallinita de los huevos de oro de la AEE, así como la compra de bitumul de
ínfima calidad que todos los municipios y agencias estatales a cargo de
mantener la red vial de carreteras compran.
Por ahí corren anualmente millonarias sumas de
dinero manejados por estos carteles que están constituidos muy fuertemente y
donde no hay reparo en las diferencias políticas, porque Don Dinero famoso caballero,
se impone a la hora de la repartición de bienes sucios.
Esos inversionistas políticos, siempre tienen en
ambos partidos sus delegados presentes que son los enlaces permanentes a la
hora de ponerse en práctica el macuteo y el buruleo.
Esos corruptores son lo que hacen fiestas,
compran taquillas para los cumpleaños de los Padrinos de estas mafias, hacen
obsequios costosos, patrocinan viajes excéntricos y se aportan a las arcas
personales de los corruptos con las excreciones verdes del Águila Americana y
no se hable de las grandes fiestas navideñas pagas, donde se botan las puertas
por las ventanas.
Mucho se ha hablado y poco se ha hecho, para
erradicar y extirpar de una vez por todas, ese cáncer maligno, que todos hasta
la saciedad sabemos que existe y que se llevan a cabo todos los días y un día
más. Durante décadas enteras esta gente ha estado en el nebuleo de tirarle dos
pulgadas de asfalto, cuando manda el contrato de que se tiren seis pulgadas y
se roban cuatro pulgadas que usted sabe a dónde van a parar.
El que venga ahora, a estas alturas del juego a
hacerse el sanano y a tratar de adjudicarse el haber descubierto esta
situación, porque estaba distraído y miraba para el lado, debe saber que la
rueda ya estaba inventada y el océano atlántico hace siglos fue descubierto. Si
fuéramos a medir el grosor de todas las carreteras primarias y secundarias del
País y a verificar si la calidad del petróleo cumplía con las especificaciones estándares
de la AEE y la EPA, medio País estuviera preso y no hubiera cárceles
suficientes para custodiar a los corruptos.
Ya es tiempo de dejar lo gerundios y ponerse a
trabajar y sobre todo poner el ojo avizor a trabajar a su máxima capacidad,
para que los nuevos funcionarios que entren, no sean abducidos y contaminados
por el sistema corrupto que opera en las tres Ramas del gobierno de Puerto
Rico.
Veremos cumplir con su responsabilidad judicial
a alguien a nivel estatal, lo dudo porque eso tendría un efecto del domino
político, de altas repercusiones y entre bomberos existe el pacto de no pisarse
las mangueras el uno al otro. Siéntese a esperar a quien será el primero que
atrapen y procesen. Aquí en este País de cómplices silentes el que no tiene
dinga, tiene mandinga, pero al final del camino algo tiene y nadie es perfecto
en la vida.
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