~! ¡RIO GRANDE! ~ ANOCHE DESPERTO LA FURIA CONTRA LOS CAFRONDOS.

Por José Cheo Cruz

La casona albergo anoche la crema de la crema de la gente de Rio Grande en la actividad con Eduard Rivera Correa y como era de esperarse los cafrondos de Ángel Boris González no podían estar allí, porque no caben dentro de esa crema de gente, porque los cafrondos, muerden la mano que les ha dado de comer y que lo hizo imitador de gente. Pero la mona, aunque se vista de seda mona se queda, Rio Grande dijo anoche cero cafrondos y corruptos como son hoy los Borianos.

Y como diaria un gran narrador de beisbol ¡!!!¡¡¡¡¡NO, NO!!!!! NO NO NO, DIGA A DIOS A ESA PELOTA DE CAFRE QUE REPRESENTA ANGEL BORIS GONZALEZ Y SU CAFRONDA ULTIMA DAMA DE RIO GRANDE, por fin ya se ve la derrota del Toro senta’o, por lo tanto anoche se celebró el funeral en grande, lleno a capacidad del corrupto, inmoral, pobre diablo del Boris, sus días ya están contado, el PPD lo decidió anoche SE ACABO EL ABUSO EN RIO GRANDE.

 No quieren darse cuenta que, existe un valor que no pasa nunca que es la solidaridad. La solidaridad es la expresión viva -hay que repetirlo continuamente-, de aquello que siempre recordamos como fundamental: el mandamiento del amor: Amar al prójimo como a ti mismo y la de ser agradecido Eduard Rivera Correa te hizo gente y cuando te convenía mentiste para ser electo por primera vez, ahí sí que Eduard Rivera Correa era importante para ti Bori, pero con todo y tus amenazas abarrotaron la casona, Te pregunto ¿lo viste caer?

El amor al próximo como a ti mismo es el elemento humano de la solidaridad. Cuando tú eres solidario con los otros, tú estás amando al prójimo, aunque no seas creyente ni aceptes los mandamientos; cuando tú no eres solidario, te lo van a echar en cara: “Mira este, con tanto poder, con tantas posibilidades y no es solidario” vengo diciéndolo hace tiempo hoy me reivindico sin duda una vez más. 

Siempre recuerdo aquella lejana anécdota del Mío Cid Campeador -estoy hablando de los siglos XII, XIII-, cuando encontró a una persona que pedía limosna y él iba desterrado. No tenía nada, le echaron todos sus bienes, la gente sabía que él era colaborador y solidario, y dijo esta famosa frase: “No tengo nada que darte, pero te doy la limosna de mi mano desnuda”. Al menos da la mano desnuda. Si la mano la puedes abrir para dar una colaboración, ábrela, porque todo ser humano ha de ser solidario.

Pero que puede usted esperar de esta cabeza hueca, engreído que jamás Rio Grande merecía, y anoche fue su epitafio, anoche fue su funeral su cuerpo está en capilla ardiente y no en la de Franki, sino en la casona. ¡Se acabo el abuso en Rio Grande! ¡y se van los cafres, por fin corazón por fin, despertó la furia contra el abuso, la corrupción y la cafreria!